El 16 de abril, fuentes rusas compartieron fotos que muestran un tanque de batalla T-72B3 obr.2016 de las Fuerzas Armadas rusas que sobrevivió al menos a tres impactos con misiles guiados antitanque mientras operaba contra las fuerzas ucranianas en la región de Donbass.
Al parecer, el carro de combate fue atacado con misiles antitanque FGM-148 Javelin, de fabricación estadounidense, y NLAW, de fabricación británica, mientras operaba al sur de la ciudad de Izyum. Los misiles no lograron matar el carro de combate, que permaneció en condiciones operativas. La tripulación del tanque no sufrió daños.
El Javelin, que se guía por infrarrojos, tiene un alcance máximo de 2.500 metros y puede penetrar hasta 600 mm de blindaje homogéneo enrollado detrás del blindaje reactivo. El misil tiene capacidad de ataque superior y de disparo y olvido.
El NLAW [Next generation Light Anti-tank Weapon] se guía por PLOS [predicted line of sight] con capacidad de fuego y olvido. El misil tiene un alcance de sólo 1.000 metros y puede penetrar más de 500 mm de blindaje homogéneo enrollado.
El T-72B3 obr.2016 está equipado con el blindaje reactivo de tercera generación Relikt, que aparentemente pudo proteger en este caso. Se afirma que el blindaje reactivo ruso es dos veces más eficaz que el Kontakt-5 de la era soviética
Desarrollado por NII Stali, el Relikt utiliza una composición de explosivos completamente nueva para conseguir una protección dinámica. A diferencia de los antiguos blindajes reactivos, funciona con la misma fiabilidad contra los misiles de baja y alta velocidad, duplicando la protección contra las cargas huecas y aumentando la protección contra los misiles guiados antitanque en un 50%.
Cabe destacar que las fuerzas de Kiev han recibido miles de misiles Javelin y NLAW de EE.UU., Reino Unido y varios otros estados de la OTAN desde el comienzo de la operación militar especial rusa en Ucrania.
