El 29 de octubre, los EE.UU. publicaron la primera fotografía de un misil tierra-aire "358", que es iraní hecho para un sistema de defensa aérea "358" desconocido.
La fotografía fue publicada en la presentación de una denuncia para confiscar dos cargamentos de misiles iraníes que la Marina de los Estados Unidos incautó en tránsito del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica (IRGC) de Irán a grupos militantes en Yemen, así como la venta de aproximadamente 1,1 millones de barriles de petróleo iraní que los Estados Unidos obtuvieron previamente de cuatro petroleros de bandera extranjera con destino a Venezuela.
Estas acciones representan las mayores acciones de decomiso del gobierno para los envíos de combustible y armas desde Irán.
"Las dos denuncias de decomiso alegan sofisticados esquemas por parte del IRGC para enviar secretamente armas a Yemen y combustible a Venezuela, países que plantean graves amenazas a la seguridad y estabilidad de sus respectivas regiones", dijo John Demers, Asistente del Fiscal General para la Seguridad Nacional. "Irán sigue siendo un Estado líder en el patrocinio del terrorismo y una fuerza desestabilizadora mundial". Es con gran satisfacción que puedo anunciar que nuestras intenciones son tomar los fondos confiscados con éxito de las ventas de combustible y proporcionarlos al Fondo para las Víctimas del Terrorismo Patrocinado por el Estado de los Estados Unidos después de la conclusión del caso".
Según los EE.UU., el misil cayó en manos de los EE.UU. gracias a las acciones del USS Forrest Sherman, que secuestró un pequeño barco que Irán estaba usando para suministrar armas a la costa occidental de Yemen, en febrero de 2020.
Se sabe muy poco sobre el misil tierra-aire 358 y el sistema que lo lanza.
Un rasgo distintivo es su compacidad, que permite lanzarlo con un pequeño cálculo desde una plataforma móvil como una camioneta.
Utilizando motores de micro turborreactor, el cohete es lanzado a la altura requerida, tras lo cual se encienden los motores de propulsión y comienza a moverse hacia el objetivo.
El misil puede permanecer en el aire durante mucho tiempo y es a la vez una munición de rezago (que ya ha sido probada en condiciones de combate en Idlib, donde el Irán destruyó un depósito de combustible con ella) y un sistema de defensa aérea, que destruye helicópteros, vehículos aéreos no tripulados de tamaño grande y mediano, aviones de ataque y aeronaves descuidadas que no esperan eso en ausencia de sistemas activos de defensa aérea, con él desde el suelo pueden lanzar un cohete a una velocidad supersónica de 8 km (que es significativamente más alta que el techo estándar de los modernos MANPADS), y luego en motores de sustentación con una velocidad menor incluso hasta 12 km (en cualquier caso, estos son los parámetros declarados para ello) con un alcance de hasta 100 km.
Según varios informes, estos misiles ya están en servicio en Irán e incluso han sido suministrados a Venezuela.
El misil en sí fue desclasificado por los estadounidenses, que publicaron la foto de un misil iraní incautado a traficantes de armas que supuestamente se dedicaban a transportar este misil al Yemen, junto con un lote de ATGM para las necesidades de los Houthis.
Si esto es cierto, entonces tal vez el Irán desee probar sus nuevos misiles en los Emiratos Árabes Unidos y las fuerzas aéreas de Arabia Saudita en condiciones de combate reales, y teniendo en cuenta el hecho de que están armados principalmente con equipo estadounidense, entonces, de hecho, para probar los misiles contra aviones y helicópteros estadounidenses.
En un informe, elaborado por un autor que siguió esta evolución a principios de 2020, se daba por supuesto que un avión de la CIA sobre el Afganistán podría haber sido derribado por un misil de ese tipo, ya que el tablero estadounidense volaba a una altura en la que no se podía alcanzar desde los MANPADS, sino sólo en el rango del misil 358.
